Lechuga, frescura pura, directo del agua a tu mesa.

La lechuga hidropónica se caracteriza por cultivarse sin tierra, utilizando soluciones nutritivas disueltas en agua para alimentar las plantas. Este método ofrece varias ventajas, como una mayor eficiencia en el uso del agua, un menor riesgo de contaminación por plagas y enfermedades, y un crecimiento más rápido y uniforme. Además, la lechuga hidropónica suele tener una textura más carnosa y hojas más firmes que la cultivada en tierra.

Características principales:

Cultivo sin suelo:
Las raíces de la lechuga se desarrollan en una solución nutritiva en lugar de tierra.

Soluciones nutritivas:
Se utilizan soluciones equilibradas de agua y nutrientes esenciales para el crecimiento de la planta.

Menor riesgo de contaminación:
Al cultivarse en sistemas cerrados, se reduce la exposición a plagas, enfermedades y contaminantes del suelo.

Calidad superior:
La lechuga hidropónica a menudo tiene una textura más firme, hojas más grandes y un sabor más intenso.

Variedades:
Existen diferentes tipos de lechuga hidropónica, como la de hoja suelta, Lechuga Crespa, Lechuga Manteca, hoja de Roble, Morada, cada una con sus propias características.